El bruxismo destaca dentro de los hábitos que os lleva de seguro al servicio odontológico, es el contacto involuntario de los dientes inferiores y superiores que provocan el rechinamiento y posible desgaste de la dentadura, pero no te líes es más común de lo que crees.
Hay personas con hábitos desagradables y poco usuales, el bruxismo afecta a una gran cantidad de personas sin que estas sepan siquiera la causa de ese malestar, este hábito además de provocar dolor tiene un impacto en la estética de la persona influyendo también en la autoestima.
Aunque pueda parecer un hábito muy excéntrico, el bruxismo afecta a un 20% de la población mundial sin distinguir entre género o edad, el bruxismo es causado por distintas razones que van desde patologías hereditarias hasta ataques de estrés, por eso es importante coger las orientaciones que se ofrecen en este post.
El bruxismo ha sido estudiado por odontólogos que lo clasifican en tres tipos principales, según el momento, la intensidad al apretarlos y la forma en que se mueven los dientes pero existen 6 síntomas que advierten el estado inicial o avanzado que se producen por este mal hábito:
Dolencia en mandíbulas: Si presentas malestar a nivel de las mandíbulas debes saber que es una de las principales alertas cuando padeces bruxismo en un nivel avanzado, cuando existe la sensación de que se aprietan los dientes y esto produce dolor.
Rechinamiento: Aunque se evidencia principalmente en las personas cuando duermen, se puede expresar de forma involuntaria en situaciones que generen ansiedad, para detectarlo hay que estar atentos a cualquier comentario de personas cercanas que noten este particular hábito.
Desgaste de esmalte: Esto se visualiza sobre todo en las visitas al odontólogo, es fácilmente detectable y representa una de las etapas iniciales del bruxismo.
Dolor de cabeza, oídos, cuello y mareos: Si usted presenta dolores de cabeza recurrentes y que varían de intensidad puede estar en presencia de un caso avanzado, el dolor causado por esta enfermedad se irradia a partes del cuerpo que no se asocian de inmediato hasta el momento de ir al odontólogo.
Chasquidos: Esto suele presentarse al hablar o al abrir la boca bruscamente, además van acompañados de leves molestias.
Bostezos y alimentación: Si al momento de bostezar o masticar los alimentos presentas malestar en la mandíbula, debes alertarte, ambos son síntomas ineludibles de bruxismo, este síntoma también se puede presentar en las mandíbulas puesto que tienden a desencajarse o a obstruirseproducto de la fuerza que se hace al prensar los dientes.
El bruxismo se clasifica en nocturno cuando los dientes son abrumados involuntariamente mientras se duerme y diurno cuando es causado de forma consiente mediante un contexto que le genera ansiedad o al realizar ejercicio físico que obliga al encuentro desgastante de la dentadura.
Cuando el diagnóstico es confirmado para bruxismo, el tratamiento básico consiste en la colocación de una férula dental o placa nocturna a medida, que logre evitar el contacto negativo y desgastante que producen la mayoría de los pacientes al dormir, también en casos avanzados se recomienda la rehabilitación de la boca mediante la relajación de la tensión en esa área del rostro permitiendo mayor flexibilidad y una recuperación más rápida.
La visita regular a los servicios odontológicos representa en la actualidad una inversión muy positiva a largo plazo, en la que podéis prevenir dolencias de esta índole y otras más comunes como caries o acumulación de sarro, mantener una higiene bucal constante es el complemento ideal para la salud y más ahora que las condiciones sanitarias por el Covid-19 exigen atención integral a todo el organismo.